domingo, 9 de agosto de 2009

Conversando sobre artes marciales con un monje budista ch'an

En los últimos días he estado conversando con un monje Ch'an impulsada por la curiosidad de entender cómo es que un monje budista practica artes marciales externas. Para mi sorpresa, su primera respuesta ante mi inquietud fue "las artes marciales provienen de los monjes, TODAS LAS ARTES MARCIALES". A decir, hasta donde yo sé, y estando sujeta a equivocarme, esto no es cierto. Aunque para el caso de China si lo es de cierta forma, puesto que la mayoría de ellas fueron desarrolladas y dadas a conocer a través de las prácticas de los monjes shaoling. Seguido a lo anterior, comenzó a explicarme sobre el origen de éstas, que está identificado en India y que, según cuenta la historia, Bodhidharma era oriundo de este país. Según él, mi incapacidad de creer en su argumentación se debe a que sigo el Budismo Theravada y no el Ch'an, ¿acaso la historia está ligada a las sectas? Aunque claro, he de reconocer en este punto, que si bien la historia como la realidad son una, ambas han sido detalladas por muchos, de ahí que existan las versiones.

La conversación se tornó más densa cuando le dije que el Vinaya no permitía la práctica de las artes marciales, ni internas ni externas. Su respuesta fue la siguiente "Pertenezco al Mahayana, entienda que yo no sigo su escuela. Los monjes daoístas aprendieron artes marciales de los monjes budistas, para luego ellos mismos desarrollar sus propias técnicas". Sé perfectamente que hay variaciones doctrinales entre las diferentes ramas del Budismo, eso no lo estaba desconociendo. Entiendo bien que los contextos sociopolíticos propios introdujeron variantes en el monacato y los impedimentos geográficos determinaron, en parte, las variantes doctrinales halladas en los textos que les son comunes. Pero eso no aminora mi intriga, menos aún cuando hay monjes enseñando Dharma y artes marciales. Menudo conflicto el mío.

Si sólo me atuviese a "seguir el Dhamma", en qué parte están las artes marciales, la defensa contra terceros, o el uso de un arma de combate? Aún no entro en la parte de si se hace uso o no de tal conocimiento, no se trata de si eres entrenado en artes marciales para aprender a desarrollar tu atención en el cuerpo o en otra cosa, o si también se le permite al aprendiz monástico defenderse. En ese tema no quiero entrar. Pero raya con mi locura aseverar que el Buddha enseñó artes marciales, aunque se trate de una versión china de la vida de Gotama, me parece una mala concepción de su vida. No se trata de negar que Gotama fue un guerrero, era un príncipe y su padre un guerrero, no le vamos a pedir a la historia y a la vida que se comportase menos que eso. Pero entonces porqué la versión india no dice que los monjes aprendían artes marciales y practicaban en el bosque? Digo, si en realidad pasaba así por qué no mencionarlo bajo la sentencia de que las artes marciales de defensa tienen raíces en India?

Espero que algun día alguien me pueda aclarar estas dudas, porque el monje cerró molesto la conversación, no es preciso recordar que se trata de una corriente Mahayana, sólo entender en qué parte un monje practica artes marciales y con qué fin? Sé que no la usan para lastimar a otros, pero ¿qué utilidad tiene practicarlas?

3 comentarios:

Jose Miguel Pueyo. Psicoanalista dijo...

José Miguel Pueyo, psicoanalista

Es conocido que en la India, el país más espiritual del mundo, una mujer es violada cada 20 minutos. Ello indica que el budismo, el yoga en sus diferentes modalidades, así como otras disciplinas y religiones, como las llamadas del Libro (judaísmo, cristianismo e islamismo) no garantizan nada –nada bueno para la persona que las profesa y tampoco para las de su entorno-. Ahora es un maestro shaolín, oriundo del país vasco, fundador del Monasterio Budista Océano de la Tranquilidad, y campeón del mundo de formas y armas de kung-fú, en tres ocasiones, y ocho de España, con el K.O más rápido de la historia de este deporte en nuestro país, Carlos Aguilar, Huang C., de 47 años, quien se hace aún más famoso, en esta ocasión por los crímenes que habría perpetrado en su gimnasio de Bilbao. En estas horas, la Ertzaintza rastrea la ría de aquella ciudad en busca de más víctimas del espiritual maestro, dado que la misma policía ha encontrado esta mañana restos humanos en bolsas de basura, presumible víctimas de este deportista de élite y maestro del control emocional mediante técnicas orientales.

Upāsikā Sabrina Sujata dijo...

Señor Pueyo,
entre su tesis y su argumento hay serios problemas de consistencia. Pero de eso no me voy a ocupar.

En primer lugar, si usted espera que una religión garantize prosperidad material y se lo ponga en un documento público autenticado, pues tiene usted problemas serios. Porque las religiones, que en sus orígenes están asociadas al pensamiento mágico, no surgieron para darle de comer a nadie.
De otro lado, ¿deben las religiones controlar las acciones (en sus 3 dimensiones) de las personas? Creo que si eso es lo que se aspira, entonces es tiempo de ir pidiendo a alguna deidad que nos traiga niñeras de tiempo completo.
El hombre perece por su propia mano, no porque ahya un "algo" que lo decida. Además, es casi común que las personas busquen cierto grado de consuelo en algo/alguien fuera de sí mismo.
De otor lado, considero que las religiones a lo largo de la historia han despertado un amplio espectro de acciones. Desde loables y dignas de emulación, hasta atrocidades que no producen menos que aberración. ¿Es un tema de las creencias sostenidas o del creyente?

En cuanto al caso del "monje" que al parecer es un asesino serial, permítame le respondo con una enseñanza propia del Buddha: Cada quien es duesño de sus propias acciones. Nada hay en este mundo o fuera de él que pueda evitar la responsabilidad.

Sergio dijo...

Creo que el comentario del Sr. Pueyo es reduccionista en exceso. Sigue más o menos la ecuación: "La práctica del hinduismo, budismo, yoga... conduce a la violación o al asesinato."

En primer lugar, la India no es, precisamente, un país "budista". Según cifras demográficas, sólo el 0,8% de la población se denomina a sí misma como "budista". Es cierto que el budismo tuvo su origen allí, pero no prosperó, quizás por un tiempo apenas, pero la India es una nación compuesta por muchas etnias y creencias. Eso sí, concuerdo, la religión que denominamos comúnmente como "hindú" es del 80.5% y sí enseña la extendida práctica del yoga y otras disciplinas de las llamadas "espirituales". Sin embargo, no está probado que la enseñanza y práctica del yoga conduzca ni a la violación ni al asesinato. ¿Verdad?

Por supuesto que ninguna religión garantiza nada. Sin embargo, se comete el error de juzgar a un grupo de creencias por las acciones de los que dicen profesarlas o practicarlas en lugar de analizar y juzgarlas por lo que enseñan en sí mismas. ¿Acaso podemos afirmar con sano juicio que el cristianismo es el responsable de las Cruzadas o de la sangrienta Inquisición? Al respecto, hay mucho que decir, pero ése es otro tema.

Los asesinos seriales sin duda presentan en su cuadro psicológico desde megalomanías hasta delirios mesiánicos y místicos. Hay una multitud de creyentes religiosos que son megalómanos y delirantes, pero eso no los convierte en asesinos seriales.

Buda, si nuestros augustos y occidentales claustros académicos de filosofía lo hubieran permitido, en lugar de ser tan prejuiciosos con las culturas de Oriente, bien podría ocupar un lugar entre los filósofos más destacados de la humanidad. Respetado y comentado por pensadores como Bertrand Rusell, Erich From, Simone de Beauvoir y otros como Sigmund Freud —quien mencionó específica y comparativamente la ausencia de tensión psíquica como Principio de Nirvana—; se me hace que mucho del prejuicio que se tiene en Occidente radica en un profundo desconocimiento del budismo.

Dejo constancia de que no comparto todas las enseñanzas que se le atribuyen a Buda, pero considero que, teniendo en cuenta la considerable cantidad de siglos que nos separa del tiempo de su existencia, mucho de su pensamiento merece ser considerado a la luz del presente, así como consideramos a Heráclito, Parménides y otros.

Con respecto a las artes marciales y su relación con el budismo mi punto de vista es sencillo: no veo relación entre lo que he leído del budismo con las llamadas "artes marciales". El budismo se extendió por buena parte del Asia donde predominaban una serie de creencias de muy diversa índole. Así es que no podemos hablar de un "budismo puro". A pesar de eso, los llamados a sí mismos "países budistas" han guerreado en cruentas y sangrientas batallas entre sí tal como ocurrió entre los países que se llaman a sí mismos "cristianos". Con esto acuerdo una vez más con el hecho que menciona el Sr. Pueyo de que las "religiones... no garantizan nada." Desconozco la cita, pero tengo por bien entendido que el código monacal del Vinaya prohíbe a los monjes contemplar una batalla siquiera. A buen entendedor, pocas palabras.

Saludos!